Es algo que nos diferencia de la inmensa mayoría de sellos de Autoedición. Su función va más allá de colocar un número en el interior de la tripa de nuestros libros: “El depósito legal es la institución jurídica que permite a la Administración General del Estado y a las Comunidades Autónomas recoger ejemplares de las publicaciones de todo tipo reproducidas en cualquier clase de soporte y destinadas por cualquier procedimiento a su distribución o comunicación pública, sea ésta gratuita u onerosa, con la finalidad de cumplir con el deber de preservar el patrimonio bibliográfico, sonoro, visual, audiovisual y digital de las culturas de España en cada momento histórico, y permitir el acceso al mismo con fines culturales, de investigación o información, y de reedición de obras”. (Texto de la página web de la Junta de Andalucía).
Con este trámite, la Editorial aporta 4 ejemplares de cada título a la consejería de cultura.